Connect with us

La fraternidad de los árboles y su lenguaje secreto 

Publicado

on

¿Qué tendría que decir un árbol si pudiera hablar? No es una pregunta hipotética: la ciencia demostró que los árboles intercambian mensajes con otros de su especie desde hace siglos y que lo que expresan, pareciera reflejar aquello que los seres humanos llamamos “fraternidad”.

Cuando vamos a un bosque caminamos entre estos gigantes mudos, sin imaginar que, bajo nuestros pies, en la tierra, existe un vasto sistema de mensajería formado por raíces, a través del cual, los árboles no solo se comunican, también se ayudan enviándose aquello que necesitan. 

La doctora en ciencias y defensora del medio ambiente, Suzanne Simard, fue quien descubrió este lenguaje subterráneo.

Simard creció en Columbia Británica (Canadá), rodeada de naturaleza, con la que sintió una conexión especial desde niña. “Mi jardín era el bosque, así que creo que mi amor por los árboles entró en mi ser desde el principio”, expresó para un artículo de La revista Vogue. 

Cuando trabajó para la industria forestal, se empezó a cuestionar por qué los árboles plantados en superficies, en donde originalmente había otros árboles, no sobrevivieran. Este cuestionamiento y la sospecha nacida años atrás, de que había mucho que descubrir en torno a esta especie, la llevo a liderar diversos estudios los cuales concluyeron en algunas nociones centrales:

Los árboles tienen un “WhattsApp” natural

Así cómo nosotros usamos WhattsApp para platicar, los árboles tienen hongos. Los hongos micorrizas se adhieren a una raíz a través de la cual, el árbol al que pertenece les transmite información, después se entrelazan con hongos aledaños con los comparten dichos mensajes, hasta llegar a la raíz de un segundo árbol. Este proceso se repite múltiples veces interconectando a todos los árboles de un bosque entre sí. 

A través de esta red, se comunican su edad, su estado de salud, si se encuentran en peligro o amenaza y conocimientos útiles para ellos y para futuras generaciones.

Existe una amorosa Árbol Madre 

El árbol o más bien “la árbol” más vieja, sostiene el equilibrio químico del bosque. Ella es quien cuida de los árboles convalecientes y quien nutre a toda la familia, hasta sus últimos momentos de vida: cuando va a morir acelera la transferencia de carbono a los árboles de menor tamaño o aquellos que lo necesitan más «Yo interpreto que hay una inteligencia, una sabiduría, una protección que se transmite de una generación a la otra. Estas plantas están conectadas en el tiempo y en el espacio, y a través de las generaciones«, expresa Suzanne.

Se ayudan mutuamente

La solidaridad es algo intrínseco a su existencia. Simard descubrió que los árboles más grandes ceden a los más pequeños, elementos vitales cómo carbono, agua, nitrógeno y fósforo.

Además, cuando uno está siendo atacado por un predador (incluido el ser humano), sus compañeros forestales les envían los nutrientes necesarios para su recuperación.

La colaboración continua es una constante en las comunidades de árboles, la cual ayuda al crecimiento de nuevos elementos, al fortalecimiento de los ya existentes y a superar daños.

Los árboles hablan y se ayudan mutuamente ¿Cómo piensas que sería el mundo si todos los seres humanos nos comportamos cómo ellos? 

Continua leyendo
Da click para comentar

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Abrir chat
Bienvenido(a) YOMX, ¿en qué te podemos ayudar?