Música para degustar servida por mesoneros

¿El rock está intentando renacer o simplemente se escondió por un tiempo? Sea la respuesta correcta para esta pregunta, Los Mesoneros han mantenido una constante para permanecer como una de las bandas independientes con aspecto innovador y con una llama que parecía haberse desvanecido hacía ya un tiempo.  Esto y más lo demuestran en su concierto-documental 10 años de indeleble.

Desde los años treinta del siglo pasado, el convenio que hay entre México y toda Latinoamérica creció, comenzando con el danzón y la troba, pasando por los ritmos con sabor, como la cumbia y salsa, llegando así a la época dorada del rock: los ochentas. 

Lo mediático que es el territorio nacional para la venta de productos ha provocado que en la última década personalidades como Okills, Mon Laferte, Lasso, Los Mesoneros y demás opten por el país con bandera tricolor para que sea su catapulta que los de a conocer a nivel mundial. 

Por esto, el pasado 2021, cuando el primer disco de estudio de Los Mesoneros cumplió diez años de su lanzamiento, la banda optó por regalarle a su fanaticada una nueva cara, con nuevo estilo a través del concierto-documental transmitido en la plataforma de streaming Goliiive. 

En dicho stream se expone lo que Luis Jiménez, Juan Ignacio Sucre y Carlos Sardi han vivido a lo largo de su carrera musical. Las anécdotas que van acompañadas de videoclips (filmados en su época de bachillerato y universidad) transportan al espectador y lo hacen sentir parte de ellos. Aquellos momentos de tristeza, incertidumbre, felicidad y logro, se congenian a tal punto que el clímax llega con el inicio de cada una de las canciones. 

Hay algunas situaciones que me gustaría destacar como lo son las participaciones de bandas de renombre como Rawayana, con quienes tocan “Aquí sigo”, y Bengala quienes ayudan a interpretar una de mis canciones favoritas de la banda, “Cuando llega el momento”. De igual forma Lasso le da un toque único a “Tokio”.

El agregar el elemento sorpresa como lo fue “Monotonía”, pieza que no salió a la luz hasta ese momento, provocó que entre el fandom se crearan suposiciones y teorías del por qué aquella pista no había salido como se tenía planeado una década atrás.

Hablando de los fans, Los Mesoneros le dan su propio espacio, algo así como un interludio en el cual escuchan cómo es que ellos han cambiado la vida de quienes han consumido sus canciones. Incluso, una videollamada de una chica australiana conmueve demasiado al tercio musical.

En cada una de las canciones se remarca aquella influencia que rescataron de Radiohead, Bengala, The Strokes, Mutemath y The Police. Es evidente en la intro de guitarra de “Cicatriz”, en la base de batería en “Malos tiempos” y los tonos vocales de Luis en “La máscara”. Sin duda un concierto que debes de escuchar para expandir tu conocimiento musical.

Un segundo bastará para darte cuenta del potencial y carisma de la banda. Te invito a que descubras el paraíso musical que te pueden ofrecer pues tienen guardado toda una Pangea de ritmos que te harán enloquecer. Así que cuando voltees y te percates de la mancha indeleble que han dejado en ti, tan solo unas últimas palabras te daré: no olvides que fui yo quien te lo advertí.