En estas fechas, es tradición familiar tapar los espejos, hacer comida de cuaresma, mojarse el sábado de gloria y sentarse a ver el viacrucis; una representación de la vida de Jesús, el principal exponente de la iglesia católica.
Alrededor del mundo, existen diversas opciones; cada una con sus peculiaridades, y aquí te presentamos algunas de ellas.
Iztapalapa, México
Para los mexicanos, es común ver esta obra, transmitida en los canales de TV abierta. Una puesta en escena que se prepara con casi 6 meses de anticipación, en los que buscan posibles actores, revisan sus perfiles y preparan físicamente al elegido.
Esta representación es pública, y se realiza por las calles del Cerro de la Estrella, en la Alcaldía Iztapalapa.
El Coliseo Romano
Esta puesta se lleva a cabo desde 1750, cuando el fraile San Leonardo Di Porto, la estableció como tradición, aunque se cree que la primera presentación fue en el año 1342. En sus inicios, se realizaba la obra dentro del Coliseo Romano, donde ciudadanos romanos, se organizaban y producían esta pieza con los objetos que tenían a la mano.
Actualmente, el papa acude al monumento y, dependiendo de su condición física, recorre todas las estaciones del Viacrucis, mientras cantan alabanzas y oraciones. En el caso de los pontífices de mayor edad, solamente portan la cruz en las primeras estaciones; en el resto, los asistentes y miembros de la iglesia, terminan el recorrido.
Filipinas
Esta representación ha sido la más polémica durante varios años, por la violencia e implicaciones físicas que conlleva participar en el.
En este país, las personas seleccionadas tienen que crucificarse de forma real; por lo que sus manos son perforadas, se les colocan coronas de espinas y son penitentes (se flagelan como forma de pagar sus pecados).
Por las condiciones en las que se realiza, todos los años se reportan afectaciones físicas y emocionales, e incluso, personas muertas por deshidratación, pérdida de sangre y cansancio.
Estas son las tres opciones más comunes para ver este evento, que por generaciones ha dado de qué hablar, seas o no creyente, pues resulta interesante ver la preparación y resultados de las semanas de ensayo. Un evento que supera récords de rating y post en redes sociales.