Taboada, Brugada y Chertorivsky: sus pros y contras rumbo a la elección

En el vibrante panorama político de las elecciones del 2024, Santiago Taboada, Clara Brugada y Salomón Chertorivsky son las figuras que buscan gobernar la Ciudad de México, cada uno con su propio estilo, experiencia y visión para la capital. Desde la alcaldía de Benito Juárez hasta Iztapalapa, pasando por su trabajo en salud y economía, han dejado una huella significativa, aunque no exenta de críticas que delinean su liderazgo.

Santiago Taboada

Como alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada demostró habilidades en la gestión urbana y el diálogo con la ciudadanía. Su capacidad para construir consensos lo posicionaron en el PAN. Bajo su liderazgo, Benito Juárez ha experimentado mejoras en infraestructura, servicios públicos y programas sociales.

Sin embargo, su comunicación a veces ha sido criticada y vista con falta de firmeza política, lo que ha llevado a decisiones ambiguas y falta de claridad en su agenda.

Clara Brugada

Como alcaldesa de Iztapalapa, se destacó por su firmeza ideológica y su compromiso con las comunidades. Su enfoque en la justicia social la ha llevado a implementar programas de inclusión y desarrollo en una de las zonas más desfavorecidas de la Ciudad de México.

No obstante, su liderazgo no está exento de controversia. La crítica más común hacia Brugada es su estilo autoritario y su resistencia a la crítica interna. Su enfoque a veces radical ha generado polarización en lugar de consenso, lo que ha dificultado la construcción de coaliciones efectivas para abordar los problemas complejos que enfrenta la ciudad.

Salomón Chertorivsky

Como figura destacada en el ámbito de la salud y la economía, Chertorivsky ha dejado una marca significativa en su trayectoria política. Su experiencia en la gestión pública y su capacidad para formular políticas innovadoras lo convirtieron en un referente en su campo.

Pero, algunos cuestionan su falta de experiencia en el ámbito político más amplio y su capacidad para negociar. Además, su enfoque técnico a veces ha sido percibido como distante o insensible a las realidades sociales más amplias.

En resumen, Santiago Taboada, Clara Brugada y Salomón Chertorivsky representan tres enfoques distintos en la política, cada uno con sus propias fortalezas y debilidades. Mientras Taboada destaca por su habilidad para negociar y su pragmatismo, Brugada se distingue por su firmeza ideológica y Chertorivsky por su experiencia en campos específicos como la economía y la salud.