El 29 de septiembre de 1964, apareció por primera vez en la revista Primera Plana una tira cómica que marcaría la historia de la literatura juvenil y del humor gráfico: Mafalda, la creación del caricaturista argentino Joaquín Salvador Lavado, mejor conocido como Quino. Seis décadas después, la pequeña de cabellera negra y preguntas incómodas continúa vigente como símbolo de crítica social, reflexión política y ternura rebelde.
Una niña que habló por generaciones
Aunque Mafalda nació como un encargo publicitario en 1962, no fue hasta dos años más tarde cuando salió a la luz oficialmente. Desde entonces, se convirtió en un espejo crítico de la sociedad, la política y la cultura, expresando desde una mirada infantil los dilemas de los adultos. Sus reflexiones sobre la paz, la desigualdad, el machismo o la burocracia han trascendido fronteras, convirtiéndola en un ícono cultural de habla hispana y del mundo.
Popularidad y permanencia en medios
Las tiras de Mafalda fueron publicadas en periódicos de América Latina y Europa, traducidas a más de30 idiomas y recopiladas en varios volúmenes que han vendido millones de ejemplares. En 1970, se publicó el libro “Mafalda: la contestataria”, que consolidó su estatus como referente literario juvenil y que más tarde inspiró numerosas ediciones especiales. Además, ha sido tema de exposiciones, documentales y homenajes en museos y universidades, demostrando la universalidad de sus mensajes.
Mafalda en la pantalla
El éxito de la historieta traspasó el papel y llegó al cine y la televisión. Entre 1971 y 1972 se produjeron 260 cortos animados de aproximadamente un minuto cada uno, dirigidos por Jorge Martín, que se transmitieron en distintos países de América Latina y España. Posteriormente, en 1982 se realizó una película de animación titulada simplemente “Mafalda”, que recopilaba algunos de esos episodios.
En tiempos recientes, el personaje también encontró espacio en plataformas de streaming: en 2019, se lanzó una serie animada basada en los cortos originales, restaurados y adaptados para su distribución digital, lo que permitió que nuevas generaciones conocieran a la emblemática niña argentina.
Un legado eterno
A 61 años de su primera publicación, Mafalda no sólo sigue siendo leída y compartida en libros y redes sociales, sino que continúa siendo material de estudio en universidades, objeto de análisis cultural y referente en debates sobre comunicación y política. Su mirada crítica sigue invitando a pensar en un mundo más justo, igualitario y humano.
Hoy, Mafalda cumple años, pero sus preguntas siguen tan actuales como siempre: ¿hasta cuándo la humanidad aprenderá a convivir en paz?