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Ostara: la revista pseudo mística que inspiró los crímenes de Hitler.

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El Adolf Hitler de 1907, adolescente austriaco huérfano, sin ocupación alguna, con problemas económicos y una carrera artística recientemente frustrada y la Revista Ostara que sostuvo en sus manos, fueron los infortunios que juntos, robustecieron la idea de lo que años después, se convertiría en el Holocausto perpetrado por los nazis.

Portadas de estilizados símbolos místicos con tipografías gótica, lucían los números de Ostara y en su interior, mensajes abiertamente racistas, misóginos y elitistas, que circularon por Europa durante siete años. 

Jörg Lanz von Liebenfels, un monje católico, aficionado al ocultismo y con marcadas ideas supremacistas, fue quien en 1905 fundó la revista. Espacio en donde amplio las ideas que un año antes, había vertido en su libro “Teozoologia”, texto centrado en la fantasía de que, las que él consideraba “razas inferiores”, descendían de la unión entre Eva (la primera mujer según la Biblia) y un demonio. 

La revista tomó el nombre de la antigua divinidad germana de la primavera, porqué a pesar de que Lonz Von era un religioso católico, promovía la teoría de que la raza aria, descendía de los antiguos dioses germanos.

Sus 80 ediciones giraban en torno al mismo tema: la superioridad de los “alemanes puros”, el supuesto peligro que los judíos, los africanos, los gitanos, los homosexuales, los socialistas, las feministas y las personas minusválidas representaban para ellos y las maneras de evitar el mestizaje a través de la castración, le segregación y la esclavitud.

Las teorías eran a menudo fundadas y entremezclados con pensamientos mágicos derivados de la mística cristiana, las religiones paganas europeas y el pensamiento hinduista.

Portada de Revista Ostara

Adolf Hitler, a los 17 años intentó ser admitido en la escuela de artes de Viena, pero fue rechazado en dos ocasiones. Un año después, su madre murió de cáncer. Sus dificultades económicas se agravaron al punto de tener que vivir entre dormitorios compartidos y refugios para personas en situación de calle.

En 1908, el futuro Führer, tomó en sus manos por vez primera la Revista Ostara y su respuesta fue predecible: quedó encantando con ella. Su obsesión creció con los meses, al grado de usar el poco dinero que tenía para viajar a sus oficinas y conocer al editor.

Años después, Lonz Van declaró recordar encontrarse con un Hitler que lucía tan pobre y perturbado, que por lastima, le regalo unos números atrasados y unas cuantas monedas para pagar su transporte de regreso.

Los mensajes de Ostara encontraron terreno llano en Hitler: concluyó fue rechazado de la escuela vienesa, a causa de que el arte, estaba controlado por judíos. Que todos, menos los heterosexuales arios de derecha, eran inferiores y un peligro. Que él estaba dotado de una superioridad espiritual, destinada a glorificar la raza pura.

La palabra escrita, ha sido y es, capaz de dirigir el destino de la humanidad: la Revista Ostara, comparte responsabilidad por los crímenes nazis.

Raulí Monteros 

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